Páginas

viernes, 1 de abril de 2011

Ya es primavera en el Karstadt

En realidad hace un mes que lo es, como hace más de un mes que no escribo aquí y debí haberlo hecho. Muchas cosas han ocurrido desde que llegó la primavera a Karlsruhe, desde que no hace frío y la ciudad hasta parece más bonita. Vino Mateo a verme dos o tres días, pero apenas pude hacerle caso, la verdad es que los dos últimos meses han sido un no parar de trabajo, pero ya está terminado, hace tres días que presenté el proyecto final de carrera, me pusieron un 1,5 (en torno a un 9 en el equivalente español) y se podría decir que a falta de papeleos y demás historias, ya soy ingeniero.

Poco después, enviaba las maletas por correos y me cogía un avión. Es decir, que cuando escribo esto ya estoy definitivamente de vuelta en Coruña, en casa, y sin mucha idea de lo que voy a hacer a partir de ahora.

Esto sería un resumen de las últimas semanas en Karlsruhe, de cómo todo se fue acabando hasta que terminó. Debo a esto un resumen más largo y detallado de mi estancia, y esta vez sí que voy a hacerlo.

domingo, 27 de febrero de 2011

Quiniela Oscar'2011

Hala, como la tengo hecha, me mojo. Quien creo (y no quien quiero) que va a ganar, a ver si hay suerte:

-Mejor película: The social network.

-Mejor director: Darren Aronofsky (así, en plan sorpresa).

-Mejor actor: Colin Firth.

-Mejor actriz: Natalie Portman.

-Mejor actor secundario: Geoffrey Rush.

-Mejor actriz secundaria: Hailee Stenfield.

-Mejor guión original: The king's speech (con tal de que no se lo lleve Nolan, lo que sea).

-Mejor guión adaptado: TSN (muy claro, al parecer).

-Mejor película de animación: Toy Story 3 (aunque se hablen maravillas de The Illusionist).

-Mejor película en habla no inglesa: In the better world (solo he visto Kynodontas y no parece muy apta, aunque me encantara).

-Mejor fotografía: Black Swan.

-Mejor montaje: TSN.

-Mejor dirección artística: True grit.

-Mejor vestuario: True grit (alguno de estos dos se lleva).

-Mejor maquillaje: The way back.

-Mejor banda sonora: TSN (postmodernismo vía Trent Reznor vs clasicismo de Zimmer y compañía, espero valentía).

-Mejor canción: Toy Story 3 (¿hay dudas?).

-Mejor sonido: Inception.

-Mejor montaje de sonido: Inception (increíble que no esté nominada Black swan en ninguna de las dos categorías de sonido).

-Mejores efectos visuales: Inception.

-Mejor documental: Exit through the gift shop (no sé si se atreverán, la verdad, y a ver qué puede liar Banksy).

-Mejor corto documental: Poster girl (no he visto ninguno, al azar).

-Mejor corto de animación: Day and night (el único que he visto, aunque me parezca un bajón respecto al de Pixar de otros años).

-Mejor corto de ficción: The Confession (no he visto ninguno, al azar).

A mojarse, que no se diga.

jueves, 17 de febrero de 2011

La semana que pasé enfermo

Últimamente estoy especialmente vago a la hora de escribir para esto, especialmente. Y se junta con el hecho de que desde el viernes de hace dos semanas me han ocurrido un montón de cosas que relato a continuación.

Me dolía la cabeza ese viernes por la tarde y decidí irme a casa pronto, para descansar y poder avanzar durante el fin de semana, a sabiendas de que el domingo por la noche llegaría Isa. Todo el fin de semana metido en cama, con algo de fiebre, tos y dolor de cabeza, sólo salí a buscar a Isa (y porque me obligó), teniendo que esperar un bus al aeropuerto durante más de dos horas.

El lunes era el tercer día que me encontraba mal, así que decidí (instigado por Isa, todo esto es su culpa) ir a la farmacia a comprar algo que me ayudara a combatir eso, pese a que no suelo tomar ningún medicamento salvo que sea considerablemente necesario. La compra, ¡20 euracos!, fue ibuprofeno y un jarabe para la tos. Tomándolos el mismo lunes y a lo largo del martes me sentí mejor y todo iba bien hasta la mañana del miércoles, en la que me levanté cubierto de ronchas y con algo de picor.

Habiendo pasado por la mitad de médicos de Karslruhe, acabé en el doctor Raulin (nombre de señor bastante amo y el de la derecha en esta foto) que me diagnosticó rápidamente alergia al ibuprofeno. Fue entonces cuando descubrí que me habían vendido un jarabe homeopático y no me había dado cuenta, con mi consiguiente cabreo.

La noche del miércoles al jueves fue épica, sin dormir apenas por culpa de los picores y el jueves por la mañana fui a comprar un antihistamínico que el dr. Raulin me había recetado y que hizo efecto bastante bien y rápido.

Total, toda la semana perdida. Menos mal que alquilamos un coche durante el fin de semana (el más barato y resultó ser un A1, vaya cochazo) y recorrimos un poco de Selva Negra y nos acercamos hasta Neuschwanstein. Un viaje que contaré, como el resto de los del último mes, cuando pueda. Espero que pronto.

jueves, 3 de febrero de 2011

Grandes noticias

Estoy consumido por la pereza, pero estimulado por lo que ha sucedido hoy y gracias a la frecuencia de actualización de Erik Clonazepam Skauch en su blog, me animo a escribir.

¿Y qué ha sucedido hoy? Pues sabiendo que oficialmente estaba confirmado que tendría que quedarme aquí un mes más, estaba bastante en el aire el tema de DÓNDE exactamente me iba a quedar. Y era un problema, vaya que si lo era. Los sitios que había sondeado me decían que para quedarme un mes preferían darle la habitación a otro que se quedara todo el Sommersemester. Estaba jodida la cosa y ya me había pasado dos o tres veces por Relaciones Internacionales (AA a partir de aquí, Akademisches Auslandsamt) sin resultado positivo, pues sólo recibía evasivas.
El caso es que hoy recibo un correo a las 16,02 sobre que queda una plaza libre por causa de una cancelación. Somos tres los que lo recibimos y dice que la plaza será para el primero que se plante allí en horario de oficina. Por si acaso, corro -sí, corro- hasta la residencia, cojo los papeles que necesito y me planto allí a las 16,12. La cara de Angelika es surreal. "¿Has recibido mi correo?" "Pero es que claro, yo pensaba que era mejor para alguien que se fuera a quedar todo el cuatrimestre..." "Bueno, tampoco es horario de oficina como ponía". Con cara de Erasmus viejo, asiento, doy largas y actúo como si no fuera conmigo, pasándole la pelota a cada momento. No me voy a ir, me tendrá que echar ella.

Y, amigos, en efecto. Tengo habitación confirmada hasta el 31. "Ni un día más, eh". Ni ganas, oiga.

También estoy contento con el progreso del proyecto actualmente. En las últimas semanas la cosa ha mejorado notablemente y, oye, me está empezando a gustar el tema y todo.

Termino esto contando una pequeña anécdota de cómo funcionan las cosas en este país. El viernes tropiezo con la tapa de una alcantarilla medio suelta y me doy una buena contra el suelo. Alguien me ayuda y me dice que va a avisar al edificio administrativo más cercano. El lunes ya no está la tapa y hay una cosa rara en su lugar. El martes está perfectamente arreglado. Las cosas funcionan. Da gusto.

Y venga, mañana hablo de viajes. Espero.

lunes, 31 de enero de 2011

Apuf

Ahora que ha vuelto el frío, ahora que he vuelto a casa, es hora de poner al día esto.

Llevo dos semanas conflictivas, casi caóticas. En la segunda de enero se sucedieron las reuniones con la tutora de proyecto "reactualizando" los objetivos de dicho proyecto. El mes de diciembre había sido bastante poco efectivo, así que decidimos alargar la estancia un mes más, incluyendo todo marzo. A ello se sumó saber las cosas por las que la tutora no estaba demasiado contenta con mi trabajo y supuso un golpe bastante duro para mi. Que no digo que no tuviera razón, pero igual tres meses son demasiado como para haber tardado tanto e, incluso, sabiendo que mi proyecto es puramente teórico, podía haberme dirigido un poco más. Pero bueno, habrá que trabajar más, sobre todo ahora que más o menos sé lo que tengo que hacer.

La siguiente semana, es decir, la que ahora acaba, fue más tranquila y parece que por fin se encamina el proyecto hacia algo más concreto, porque el principal problema pasaba por que hace dos semanas no tenía demasiado claro hacia dónde debía encaminarlo. Eso lo achaco y eso le dije a la tutora hace dos semanas, que estaba un poco perdido sobre qué debía hacer. Pero bueno, considerablemente contento con la evolución en estos diez días.

Entremedias, varias pochas (estoy en pésima forma, ni una victoria en 2011) y dos viajes fantásticos: un fin de semana a solas en Poznan viendo a los Godspeed you! Black emperor y otro en Holanda en casa de Mihai, un viejo amigo de la infancia. Podría y debería reseñarlos (algo estoy escribiendo del primero para postrock.es) aquí, igual que tengo pensado reseñar un resumen de 2010 y una serie de historias de cara a este año. El tiempo pasa y no lo hago, como casi todo, pero lo haré esta semana. Tengo que hacerlo.

Hale, con dios.

jueves, 13 de enero de 2011

Orsai, colaboraciones y novedades

Me propuse por año nuevo empezar de una vez Niebla de Unamuno, libro que sé que me encantará pero llevaba varios meses aparcado en mi mesilla. Pero entonces, llegó Orsai (nadie en el medio). La revista autoeditada de Casciari es una auténtica maravilla a nivel de maquetación, grafismo y edición.Voy por la mitad y sigo absolutamente enganchado a las historias, relatos y artículos escritos y dibujados por colaboradores de lujo (desde Agustín Fernández Mallo hasta Nick Hornby u Horacio Altuna).
En tres o cuatro días sale en versión PDF (por los propios autores) gratuita y no contiene publicidad de ningún tipo, ya os pasaré el link, merece la pena.

Y ahí anda Niebla, abandonada en la estantería.

Por otra parte, quería hablaros hace tiempo de los sitios web con los que, desde hace un par de meses, vengo colaborando. Una revista online de cine llamada cineuá en la que he escrito sobre Vargtimmen y un blog de música postrock en castellano. Ahí me podréis leer de vez en cuando, mi compromiso tampoco es demasiado serio, la falta de tiempo y la cantidad de cosas que quiero hacer al  mismo tiempo.

En cuanto a la vida real, la vuelta al trabajo está siendo agridulce. Me han contado que han contratado/becado una persona a tiempo parcial para hacer el trabajo que yo estaba haciendo y que no me correspondía. El trabajo al que dediqué parte de las navidades fructifica, por suerte. Pero sigo siendo tan desastre como siempre: un olvido que me impidió comenzar a realizar ciertos experimentos y hoy he creado un bonito charco en el laboratorio por torpe. Estoy contento, algo más contento, al menos.

martes, 11 de enero de 2011

Afuera todo es ruido.

Mientras todos hablan de deporte, o ni siquiera, vos debés seguir sonriendo con cara de pibe travieso.
Seguí mejorando esas cosas que antes no sabías hacer, seguí sorteando, gambeteando, combinando y asistiendo, chutando, disfrutando.
Seguí jugando, Leo. Porque mientras afuera todo es ruido, adentro de la cancha, donde valen las cosas, vos seguís siendo el que mejor juega al mejor juego jamás inventado.

Gracias.

lunes, 20 de diciembre de 2010

Crónica de 15 días de picos y valles (y iii)

Día #5, Valle #5: Llegamos a la habitación y comprobamos todo porque nuestro tren sale en menos de seis horas. Compruebo personalmente que, efectivamente, me he equivocado al imprimir uno de los billetes, concretamente el que hemos de usar dentro de seis horas para el tren dirección a Berlín (un sábado a las ocho de la mañana, para más datos). Nuevamente loqueo, pregunto a todo el que me encuentro a mano, golpeo puertas. Conviene recordar que son las dos de la mañana de un viernes en una residencia universitaria, mayoritariamente de gente de intercambio, ergo, o no hay ni dios o tienen una buena razón para no abrirme.

Día #5, Pico #6: Compruebo que a las 0218h de un sábado la universidad está abierta y puedo entrar a imprimir el billete. No hay tragedia y no he tenido que sobornar al recepcionista de un hotel cercano como había propuesto Isa.

Día #5, Pico #7: Muchos sustos y contratiempos después, llegamos a Berlín. Descubrimos que las habitaciones del Easyhotel son todavía mejores que las del de Londres (dentro de lo que hay por 30€/noche) y que todo está entre considerablemente y muy nevado.
Willkommen in Berlin.
Días #5 a #11: No voy a descubriros ni repetiros lo que opino sobre Berlín. La palabra que mejor la define es sorprendente. Hizo frío (muchísimo) y nevó como si estuviera llegando el fin del mundo. Amo Berlín. La ciudad del fin del mundo.
La noria del Weihnachtmarkt de Alexanderplatz.

La típica foto de una bici, un tranvía y todo nevado. Postal.

Una de las pocas de las que, realmente, estoy contento.

Otra que se puede añadir a la categoría anterior. Un Helios en el Altes Museum.

La niebla nos robó la Torre de la Tele y nos perdimos un poco.

Durante todo el día, siguió escondida.

Navidad en Brandemburgo.

La Puerta de Brandemburgo.

Mercado de Alexanderplatz.

Patinaje en Alexanderplatz.

Sí, nevaba, sí.

Charlottemburgo enterrado en nieve.

Monumento soviético, más soviético que nunca.

Quince o veinte centímetros de nieve.
Visto lo visto, y dado que los aeropuertos de París habían estado cerrados a lo largo de todo el día anterior y que nunca habíamos visto nevar tanto como lo que nos nevó el último día, se me ocurrió comentar lo siguiente:
- "A ver si en vez de ser por culpa de París, nos quedamos aquí por culpa de Berlín".

Día #11, Valle #6: Descubrimos, pues, al llegar al aeropuerto y tras pasar un par de horas allí, que nuestro vuelo a París ha sido cancelado. Nos resignamos con mucha rapidez y nos movemos hasta la estación de tren para coger el primer tren de los posibles de vuelta a Karlsruhe. No es barato, pero dado que hemos conseguido que nos devuelvan dinero de vuelos, alojamiento y demás historias ya pagadas, se puede decir que no hemos perdido nada de dinero en ello (viva venere.com, desde aquí mi agradecimiento y mi publicidad a su servicio). Definitivamente, estamos cansados de este viaje y renunciamos.

Días #12 y #13: Estamos de vuelta en Karlsruhe. Visitamos cosas (Ettlingen), paseamos por el Mercado de Navidad y me cuelo en un ICE (el AVE alemán) sin pagar mientras escribo esto en mi libreta, volviendo hacia KA después de acompañar a Isa hasta Heidelberg. Así es la vida cuando uno no está en casa.

domingo, 19 de diciembre de 2010

Noticia

Interrumpimos la emisión para ofrecerles una noticia de alcance. Se hace saber a todos los lectores de este blog que un servidor ha sacado un 7.4 en el último examen de la carrera y no tendrá, pues, que comerse las palabras que pronunciaba en la entrada anterior a tal efecto. Carrera terminada a falta de PFC.

Por otra parte y aprovechando que los viernes los museos de Karlsruhe son gratuitos, fui ayer al ZKM por primera vez y me llevé una grata sorpresa. No sólo por su tamaño (tres museos en uno: arte contemporáneo, audiovisual y tradicional), sino por el propio edificio y su contenido, ciertamente interesante, desde luego.

La semana ha terminado. Frustrante, mucho, ya que mi tutora ha estado enferma y sin que ella venga no puedo avanzar ahora mismo en el proyecto, con lo que no he hecho absolutamente nada. Tres días me quedan para volver a casa por Navidad y mucho, mucho trabajo por hacer.
Foto considerablemente trepidada del museo en sí. Una pena.

jueves, 16 de diciembre de 2010

Crónica de 15 días de picos y valles (ii)

Día #3, Pico #2: Menos mal que pude arreglar el problema y confirmar que el examen sería al día siguiente sin problemas. Al menos por su parte, porque yo estaba en estado de acojone máximo sabiendo lo flojo que lo llevaba, pero teniendo mucho que agradecer a mi profesor en Vigo por haberse acordado del tema y haberme mandado el correo ya famoso.

Día #4, Pico #3: Si me dicen que el día que iba a terminar la carrera (a falta de PFC, claro) iba a hacer tal examen en el despacho de un profesor alemán viendo nevar a cholón por el ventanal de su despacho, pues qué queréis que os diga, no me lo creo. El examen sale medianamente bien, por lo que espero no tragarme las palabras con las que empiezo el párrafo. En unas horas, además, llega Isa, ya debería haber cogido el avión...

Día #4, Valle #3: Puteo máximo. De cuatro controladores que tenían que estar presentes en su puesto de trabajo un jueves de diciembre previo a al puente de la Constitución, no han aparecido tres. Ryanair cancela su vuelo e Isa se queda en tierra. ¿Opciones para llegar a Karlsruhe antes del sábado para coger el tren que nos debía llevar a Berlín? Pocas y descabelladas. Escogemos (por decir algo) la que parece más cabal, aunque no lo parece, pero estando la Deutsche Bahn (la RENFE alemana, un ejemplo a seguir) de por medio, no puede salir mal. Viajar el viernes a mediodía desde Porto hasta Bremen y desde allí coger un tren hasta Karlsruhe (6 horas y pico). Llegada a KA ya el sábado sobre las 12.30 de la madrugada. Para situaros.

Día #4, Valle #4: Llamada de Isa. Dice que está montada en un tren al que llegó de forma milagrosa (en serio), pero no sabe ni hacia dónde va exactamente ni qué transbordos debe haces para llegar a Karlsruhe. Yo, que pensaba que ella lo tenía ya mirado, loqueo por toda la estación (Hauptbhanhof, HBF) de KA buscando tal información en alemán preguntando por ventanillas y demás. Ella loquea por todo el tren buscando tal información en inglés preguntando hasta conseguir una conexión a internet que le permita mirarlo. Logramos solucionar el tema, pero la coña se me lleva 21€ en móvil. A ella, supongo que mucho más, no quiero ni saberlo.

Día #4, Pico #4: Actuación lamentable en la primera pocha, pero gano la segunda. Hacía semanas que no pasaba. Lo necesitaba.

Día #5, Pico #5: Llega Isa. 30 horas más tarde y mucho dinero invertido que espera que alguien le devuelva algún día. Estamos en Karlsruhe y son casi las dos de la mañana, nos vamos a pasear por la nieve.
Sí, había nieve.