Páginas

domingo, 27 de febrero de 2011

Quiniela Oscar'2011

Hala, como la tengo hecha, me mojo. Quien creo (y no quien quiero) que va a ganar, a ver si hay suerte:

-Mejor película: The social network.

-Mejor director: Darren Aronofsky (así, en plan sorpresa).

-Mejor actor: Colin Firth.

-Mejor actriz: Natalie Portman.

-Mejor actor secundario: Geoffrey Rush.

-Mejor actriz secundaria: Hailee Stenfield.

-Mejor guión original: The king's speech (con tal de que no se lo lleve Nolan, lo que sea).

-Mejor guión adaptado: TSN (muy claro, al parecer).

-Mejor película de animación: Toy Story 3 (aunque se hablen maravillas de The Illusionist).

-Mejor película en habla no inglesa: In the better world (solo he visto Kynodontas y no parece muy apta, aunque me encantara).

-Mejor fotografía: Black Swan.

-Mejor montaje: TSN.

-Mejor dirección artística: True grit.

-Mejor vestuario: True grit (alguno de estos dos se lleva).

-Mejor maquillaje: The way back.

-Mejor banda sonora: TSN (postmodernismo vía Trent Reznor vs clasicismo de Zimmer y compañía, espero valentía).

-Mejor canción: Toy Story 3 (¿hay dudas?).

-Mejor sonido: Inception.

-Mejor montaje de sonido: Inception (increíble que no esté nominada Black swan en ninguna de las dos categorías de sonido).

-Mejores efectos visuales: Inception.

-Mejor documental: Exit through the gift shop (no sé si se atreverán, la verdad, y a ver qué puede liar Banksy).

-Mejor corto documental: Poster girl (no he visto ninguno, al azar).

-Mejor corto de animación: Day and night (el único que he visto, aunque me parezca un bajón respecto al de Pixar de otros años).

-Mejor corto de ficción: The Confession (no he visto ninguno, al azar).

A mojarse, que no se diga.

jueves, 17 de febrero de 2011

La semana que pasé enfermo

Últimamente estoy especialmente vago a la hora de escribir para esto, especialmente. Y se junta con el hecho de que desde el viernes de hace dos semanas me han ocurrido un montón de cosas que relato a continuación.

Me dolía la cabeza ese viernes por la tarde y decidí irme a casa pronto, para descansar y poder avanzar durante el fin de semana, a sabiendas de que el domingo por la noche llegaría Isa. Todo el fin de semana metido en cama, con algo de fiebre, tos y dolor de cabeza, sólo salí a buscar a Isa (y porque me obligó), teniendo que esperar un bus al aeropuerto durante más de dos horas.

El lunes era el tercer día que me encontraba mal, así que decidí (instigado por Isa, todo esto es su culpa) ir a la farmacia a comprar algo que me ayudara a combatir eso, pese a que no suelo tomar ningún medicamento salvo que sea considerablemente necesario. La compra, ¡20 euracos!, fue ibuprofeno y un jarabe para la tos. Tomándolos el mismo lunes y a lo largo del martes me sentí mejor y todo iba bien hasta la mañana del miércoles, en la que me levanté cubierto de ronchas y con algo de picor.

Habiendo pasado por la mitad de médicos de Karslruhe, acabé en el doctor Raulin (nombre de señor bastante amo y el de la derecha en esta foto) que me diagnosticó rápidamente alergia al ibuprofeno. Fue entonces cuando descubrí que me habían vendido un jarabe homeopático y no me había dado cuenta, con mi consiguiente cabreo.

La noche del miércoles al jueves fue épica, sin dormir apenas por culpa de los picores y el jueves por la mañana fui a comprar un antihistamínico que el dr. Raulin me había recetado y que hizo efecto bastante bien y rápido.

Total, toda la semana perdida. Menos mal que alquilamos un coche durante el fin de semana (el más barato y resultó ser un A1, vaya cochazo) y recorrimos un poco de Selva Negra y nos acercamos hasta Neuschwanstein. Un viaje que contaré, como el resto de los del último mes, cuando pueda. Espero que pronto.

jueves, 3 de febrero de 2011

Grandes noticias

Estoy consumido por la pereza, pero estimulado por lo que ha sucedido hoy y gracias a la frecuencia de actualización de Erik Clonazepam Skauch en su blog, me animo a escribir.

¿Y qué ha sucedido hoy? Pues sabiendo que oficialmente estaba confirmado que tendría que quedarme aquí un mes más, estaba bastante en el aire el tema de DÓNDE exactamente me iba a quedar. Y era un problema, vaya que si lo era. Los sitios que había sondeado me decían que para quedarme un mes preferían darle la habitación a otro que se quedara todo el Sommersemester. Estaba jodida la cosa y ya me había pasado dos o tres veces por Relaciones Internacionales (AA a partir de aquí, Akademisches Auslandsamt) sin resultado positivo, pues sólo recibía evasivas.
El caso es que hoy recibo un correo a las 16,02 sobre que queda una plaza libre por causa de una cancelación. Somos tres los que lo recibimos y dice que la plaza será para el primero que se plante allí en horario de oficina. Por si acaso, corro -sí, corro- hasta la residencia, cojo los papeles que necesito y me planto allí a las 16,12. La cara de Angelika es surreal. "¿Has recibido mi correo?" "Pero es que claro, yo pensaba que era mejor para alguien que se fuera a quedar todo el cuatrimestre..." "Bueno, tampoco es horario de oficina como ponía". Con cara de Erasmus viejo, asiento, doy largas y actúo como si no fuera conmigo, pasándole la pelota a cada momento. No me voy a ir, me tendrá que echar ella.

Y, amigos, en efecto. Tengo habitación confirmada hasta el 31. "Ni un día más, eh". Ni ganas, oiga.

También estoy contento con el progreso del proyecto actualmente. En las últimas semanas la cosa ha mejorado notablemente y, oye, me está empezando a gustar el tema y todo.

Termino esto contando una pequeña anécdota de cómo funcionan las cosas en este país. El viernes tropiezo con la tapa de una alcantarilla medio suelta y me doy una buena contra el suelo. Alguien me ayuda y me dice que va a avisar al edificio administrativo más cercano. El lunes ya no está la tapa y hay una cosa rara en su lugar. El martes está perfectamente arreglado. Las cosas funcionan. Da gusto.

Y venga, mañana hablo de viajes. Espero.